Naomi Sofía Figueroa Álvarez, funcionaria del Gobierno de Guadalajara, admitió públicamente en una transmisión de TikTok haber participado en el sacrificio de un perro como parte de un ritual religioso.
La empleada relató el acto como parte de su práctica en la religión orisha, también conocida como santería, la cual contempla sacrificios animales en sus ceremonias.
"Yo, por ejemplo, tuve que hacer un sacrificio muy grande... le cortaron a un perro. Era para que me quitaran a mis enemigos del camino. Todos van a caer", expresó Figueroa mientras deslizaba su mano por el cuello en señal del acto.
Naomi Sofía trabajaba como colaboradora especializada en la Dirección de Colmenas y Centros de Cuidado Comunitarios, dependiente de la Coordinación General de Construcción de la Comunidad, pero, de acuerdo con un comunicado del gobierno de Guadalajara, Figueroa dejó de laborar en el municipio el pasado 31 de mayo: "La persona en cuestión no forma parte de esta administración desde el pasado 31 de mayo, fecha en la que se dio de baja por término de contrato".
Es hija de Susana Priscila Álvarez Hernández, exdirectora del Instituto Municipal de Atención a la Juventud, quien fue sancionada en el año 2019 por viajar sin autorización. También fue señalada por presunto desfalco y actualmente labora en el Gobierno estatal.
El video que está siendo difundido en redes sociales ha provocado indignación en la ciudadanía, colectivos animalista de Jalisco han solicitado al Ayuntamiento de Guadalajara una investigación inmediata y además, la separación del cargo de la funcionaria.
En Jalisco, el Código Penal, en su artículo 306, establece sanciones que van de los 3 a 5 años de prisión y multas 200 a mil UMAS (hasta 113 mil pesos), además de trabajo en libertad en beneficio de la comunidad.
La Ley de Protección y Cuidado de los Animales del Estado de Jalisco, está prohibido el uso de animales en rituales que impliquen dolor o muerte innecesaria, incluso si son parte de creencias religiosas.